En el mirador que hay al inicio de la ruta

En verano nos gusta mucho salir a cenar de picnic, pero claro en invierno no es viable hacer picnic por la noche y menos con los niños. Por eso buscamos alternativas, buscamos alguna ruta bonita y fácil para poder hacer con los niños y que sitio para hacer picnic…cargamos la mesa y las sillas plegables en el maletero y nos vamos a la aventura.

Una de las primeras que hicimos fue a Chulilla. Es un municipio de Valencia que cuenta con apenas unos 1.000 habitantes. A su paso por el interior de Valencia, el río Turia atraviesa un impresionante cañón de paredes verticales, que será lo que veremos durante todo el recorrido y lo cruzaremos gracias a los dos puentes colgantes.

Nosotros fuimos directamente a hacer la ruta de los puentes colgantes. Si buscas en Google Maps te dirige a un a zona habilitada para aparcar que está pegado al pueblo, pero es pequeño y si no llegas muy pronto es imposible dejar el coche. Volviendo atrás hacia el inicio de la ruta la gente suele dejar los coches en una explanada que hay en la montaña, al lado de la carretera y nosotros hicimos lo mismo.

Vistas desde el inico de la ruta
Vistas desde el inicio de la ruta

Andas muy poquito hasta el inicio de la ruta, además no es nada complicada, sobre todo el principio que es todo bastante llano.

Para llegar a los puentes sí que hay que bajar un buen tramo de escaleras bastante empinadas. Una vez bajas llegas al primer puente colgante que es el más largo. Al cruzarlo llegas a la garganta del río…este será el único sitio con sombra que encontraremos y además es una zona muy bonita y tranquila. Después subiremos un pequeño tramo de escaleras para llegar al segundo y más pequeño de los puentes. Una vez lo cruzas el camino se estrecha hasta el punto de tener que pasar de uno en uno. Cuando fuimos nosotros había mucha gente en toda esa zona y ese paso estrecho no pudimos hacerlo porque venía mucha gente de cara, así que dimos la vuelta.

El primer puente (el más largo)
Vistas desde el primer puente
El segundo puente (el más corto)

Es una ruta que se puede hacer con niños, pero con niños que estén preparados para andar, porque como os digo, aunque no es complicada, la vuelta de los puentes con las escaleras (que ahora tendremos que subir) agotan hasta a los mayores. Por supuesto no es una ruta para hacer con carros.

Hay otra opción, que es bajar por el otro lado y llegar al embarcadero, pero nosotros no bajamos, pues ya los niños estaban muy cansados (y nosotros también) como para hacer otra ruta. Se nos queda pendiente para la próxima, así como entrar a visitar el pueblo.

El embarcadero visto desde arriba

Os recomiendo que esta ruta no la hagáis en verano, porque hay muy poca sombra y si lo hacéis id preparados con gorras y agua.

Para reponer fuerzas se puede hacer el picnic justo donde hemos aparcado el coche.

Nosotros volvimos muy cansados, pero os aseguro que nos mereció la pena el agotamiento, porque el paraje es precioso.

Si estáis en pleno proceso sabréis de lo que os hablo, sino os lo cuento…

Cuando tu hij@ cumple 3 años o está apunto de cumplirlos, empiezas a pensar a que centro escolar te gustaría que acudiese. Es una decisión importante pues va a pasar en dicho centro como mínimo 9 años, así que hay que mirar muy bien y escuchar opiniones, aunque la verdad esto último es secundario, pues de un mismo centro escucharas muchas opiniones diferentes, unas buenas, otras regular, otras malas,…

Lo primero que hemos de tener en cuenta son los requisitos indispensables que debe reunir dicho centro, como por ejemplo:

  • Proximidad del centro al domicilio familiar o a nuestro puesto de trabajo.
  • Instalaciones, con patio exterior (al menos que vean la luz del sol no solo a través de las ventanas)
  • Que dispongan de servicio de comedor, si no podemos recogerlos para comer en casa.
  • Que dispongan de servicio de entrada por la mañana más pronto, si nuestro horario laboral no nos permite dejarlo a las 9.

Una vez hemos encontrado un centro que cumple con los requisitos nos queda enterarnos de cuando hacen la jornada de puertas abiertas y acudir para conocer el centro, la dirección y el equipo docente del mismo, así como la propuesta educativa de que disponen.

Si tenemos la suerte de que cumple los requisitos, el colegio nos ha encantado, su propuesta educativa nos parece la ideal para nuestro hijo y el equipo docente nos ha convencido, hemos tenido mucha suerte, aunque ahora lo que nos toca es preparar papeles como para hacer una oposición, rellenar un formulario en el que además de ese centro tan maravilloso deberemos indicar otros 9 más ¿9? ¿pero hay tantos centros en mi localidad o las proximidades que me gusten? pues los habrá seguro, la duda es si nos gustarán tanto, pero bueno, como me dijo el conserje de un centro «pon los 10  centros, porque de los que menos te gusten seguro que te gustarán más que el centro que te pueda tocar si no los indicas» lo que viene siendo que, si solo pones los 2 o 3 centros que más te gustan, si ahí no tienes suficientes puntos y no tienes plaza, te colocarán a tu hijo en un centro donde la gente no quiera llevar a sus hijos.

Bueno, seguimos con el proceso. Nosotros presentamos los papeles para solicitar centro y para ello te piden mucha documentación que certifique tu situación personal, familiar y laboral. Como se suele decir «más vale que sobre que no que falte» así que lleva toda la documentación con originales y fotocopias y luego en el centro que discriminen lo que necesitan y lo que no.

Una vez presentada la documentación te toca esperar unos 20 días hasta que salen las listas donde se indica si has tenido suerte (de suerte nada, has de cumplir determinados requisitos para obtener puntos que te permitan sumar al menos el mínimo solicitado para que tu hijo pueda ir al centro que deseas. Cumplir los requisitos tampoco es nada fácil, valoran proximidad al centro, renta familiar, si tienes hermanos en el centro, si sois familia monoparental, familia numerosa,…) y podrás llevar a tu hijo durante los próximos 9 años al centro que querías o a cualquiera de los otros 9 que habías indicado en el listado.

Como veis no es un proceso rápido, ni sencillo, ni vamos a ser sinceros justo, pues se valoran determinadas cosas a la hora de dar o no puntos que son discriminatorias, pero como no podemos luchar contra eso, no nos queda más que armarnos de valor y paciencia, mucha paciencia 🙂

¿Como ha sido vuestra experiencia?

La verdad que en 10 años que hace que matriculé a mi hijo mayor han cambiado mucho las cosas, ahora son más selectivos en este proceso, piden mucha más documentación y tienen en cuenta a la hora de puntuar cosas que antes no se valoraban.

 

 

 

La educación de nuestros hijos es importante, han de formarse en diferentes materias para adquirir un amplio abanico de conocimientos, pero también es muy importante que les eduquemos en valores.

Educar en valores consiste en que no se limite al aprendizaje de materias, habilidades y temarios, planteándose metas relacionadas con el ámbito moral y el civismo, con objetivo final de formar ciudadanos responsables.

Esto es muy importante y aunque está claro que una parte importante de dicha educación se debe de dar en casa, considero que en los centros educativos los profesores deberían hacer lo mismo.

Con tantos casos de bullying como aparecen cada año en los centros escolares, debería generarse una educación en los centros y crear un protocolo de actuación para junto con las familias afectadas tratar y atajar dichos abusos. Que no digo que no los haya, seguro que hay centros donde llevan muy controlado todo esto, pero también sé que no en todos.

En casa sufrimos hace algunos años un caso de bullying con uno de nuestros hijos y os aseguro que se pasa muy mal cuando veas a tu hijo noche tras noche llorar contándote lo que le ha pasado y contándote como en el centro no le hacen caso. Ir reunión tras reunión con la dirección y los responsables del centro y que aparte de negar los hechos tampoco veas implicación en el asunto es muy frustrante y genera una sensación de impotencia horrible.

Queda mucho camino por andar en estos temas, pero por suerte se va trabajando, aunque aún se ven actitudes y comentarios en chavales que te hacen plantearte que tipo de personas estamos formando para el futuro.

Evidentemente educar en valores no solo abarca trabajar la igualdad y la no discriminación, también incluye la educación sexual, el consumo lógico y razonable, el medio ambiente, el cumplimento de las normas, promover la salud,… hay muchos frentes que trabajar. Lo ideal sería que las familias y los centros escolares aunasen esfuerzos para conseguir una buena educación en valores.

¿Como veis la implicación por parte de los centros escolares?